En los tiempos que corren, donde lo más fácil y rápido es buscar en internet, la importancia de tener una web de tu empresa es indiscutible.
¿Qué haces cuando buscas un restaurante? ¿Y cuándo necesitas reparar algo?
Buscarlo en Google; y tus clientes hacen lo mismo.
Por eso es imprescindible tener una buena web que te represente y exponga tus productos o servicios. Y no solo eso, sino que además necesitas que esté bien posicionada en buscadores para que puedan encontrarte.
5 ventajas de tener una web de tu negocio
- Refuerza tu imagen corporativa
- Tu imagen corporativa impregna y define tu web, transmitiendo la filosofía y forma de hacer de tu empresa. Una de las mayores ventajas de la web frente a las redes sociales, es que controlas exactamente la información que quieres mostrar y cómo la muestras. En las redes sociales, todo esto queda encasillado y diluido dentro del formato de cada plataforma.
- Tienes abierto 24 horas
- Tu web te permite estar siempre disponible. Tanto para ofrecer tus servicios, como para dar tus datos o para facilitar la comunicación. Todo a cualquier hora. Tus clientes podrán encontrarte en el momento que te necesiten.
- Consigue nuevos clientes que buscan justo lo que tú ofreces
- Con tu web bien posicionada en los resultados de búsqueda consigues que te encuentren en el momento justo en que necesitan tus productos o servicios. Esto es una gran ventaja ya que te presentas a potenciales clientes como solución a sus necesidades.
- Te sirve de publicidad
- Tu web es una buena manera de publicitarte diariamente con un mínimo esfuerzo. Es un anuncio permanente que puede contar diferentes cosas según lo vayas necesitando. Tiene un gran alcance con un coste realmente bajo.
- Puedes medir y analizar el comportamiento de tus usuarios
- Con tu web puedes medir el tráfico y otras métricas relevantes, de esta manera podrás tomar decisiones basadas en datos. Podrás destacar los servicios que despierten más interés, modificar los que pasen más desapercibidos, etc. Dispondrás de la información necesaria para diseñar nuevas estrategias.
Teniendo en cuenta todas estas ventajas, y si aún no tienes una web de tu empresa, ha llegado el momento de que te plantees si realmente te sale rentable no estar en internet.